viernes, 12 de diciembre de 2008

Ella paga , yo no



Cuando el reloj ya marcaba las once y media de la noche, sentí y me dije a mi mismo que tenia que marcharme, no lo quería hacer , si no me ganaría una charla con sus padres , y eso es muy aburrido, prefiero irme por la puerta grande y sin cargo de conciencia.

Estábamos despidiéndonos, me había dicho que me quedara a cenar pero desistí, era tarde, ella comprendió y me acompaño a la puerta, con una sonrisa en los labios y su rostro iluminado por la noche que me llevaba a estados de hipnotismo con tan solo mirarla, ella era así, son su mirada era capaz de hechizar a cualquiera, pero conmigo no lo logra, al menos eso es lo que siento.

De camino a casa, me he echado a pensar mientras paseo y doy pasos largos por la avenida recta y casi desierta del canal siete , a pensar en mi relación o , mejor dicho en la relación que acabo de empezar , yo no quería aventurarme en esto , pero yo después de tanto pedir y meses de insistencia , casi le digo que por el momento no quería estar con nadie , pero era algo imposible decirle eso a una chica tan dulce como ella , su mirada en la tarde cuando me dio el si , me derrumbo , era esa mirada llena de luces y que brilla cuando ve a alguien o algo que la hace desfallecer, esa mirada , yo, no la podía rechazar.

Llegue a mi casa ya pasadas las doce de la noche , me había demorado comprando o mejor dicho rogando al señor de la tienda que me venda cigarrillos a pesar de ser menor de edad, me los dio después de tanta insistencia y me quede sentado en un parque muy chico en un cruce de avenidas que separa a lince de santa Beatriz, este parque es desolado, para cerrado o vacio, por eso me gusta venir aquí a fumar y pensar en lo que hare de ahora en adelante , lo peor es que hasta hace unas horas lo tenia todo planeado y arreglado , pero desde las cinco de la tarde de hoy , mi vida no volverá a ser la misma.

Al cruzar el umbral de la puerta, me he topado con la figura robusta de mi padre con cara de pocos amigos, de seguro me dará una requintada o me dirá talegon como me decía de niño, pero al decirle donde estuve calma su ira, me dice que tenga cuidado con las mujeres que a veces suelen ser vivas y agarrar a los hombres, pero lo corrijo: ella no es así. Mientras  le digo esas palabras se calma un poco y me da tregua con sus preguntas insistentes, cosas que la verdad no valen la pena escribir y contar. No sabe que fumo, el lo hace cada cierto tiempo cuando esta con sus amigos tomando o celebrando, pero tengo miedo que me sienta el olor, por eso me he ido al baño, raudamente a ponerme la ropa de dormir y acostarme de una vez, y así dejar de sembrar dudas en el y definitivamente pasar y terminar el día de hoy, por que creo que ya fue bastante por hoy.

He despertado tarde como de costumbre cuando me acuesto tarde , bueno en realidad siempre me acuesto tarde a causa de una novelita o algún cuento que me vino a la mente y deseo terminar y así poder dormir tranquilo, el desayuno me espera ya , y el café caliente y el pan son lo único que tendré en la barriga por el resto del día: "después tomare algo en la calle , por que tengo que vivir lo que estoy escribiendo", le digo a mi padre, que me dice donde almorzare y ríe al escucharme hablar , rio con el sin saber bien por que.

Estoy de salida, mientras espero el bus que me llevara al centro de la cuidad, el celular suena, odio sacar el celular en la calle, me da temor que algún malandrín me lo arranche o me lo despoje, por eso me meto a la tienda a comprar algo para el camino y a la ves contestar la llamada de ella.

- ¡hola!, como estas - oigo su voz 

-¡ah!, hola como estas- digo fastidiado

-¿que te pasa?, estas bien - pregunta y me da rabia

-no, nada, que tal que me cuentas-digo tratando de salir del aprieto

Al escuchar mis palabras un poco frías, me sentencio que me tiene que ver, resignado yo, acepto y nos quedamos en ver en el parque desolado del limite de calles y en veinte minutos no se que diré.

Salgo de la tienda con una coca-cola bien helada, en las manos, camino largo y doy una vuelta en el ovalo que es mi “barrio”, miro a la gente pasar al mercado, van raudos a comprar las cosas a cocinar, de seguro sus hijos comerán algo rico y se sentaran con sus padres a comer y disfrutar ese momento, cuanto daría yo por tener esa dicha.

Dejo de pensar.

Me faltan dos cuadras y ya logro verla sentada con su ipod y revista en mano me espera la niña mujer que de seguro me dará una charla de cómo contestarle a su enamorada, unas lecciones de buenos modales y cariño con su conyugue, como de seguro se lo ha enseñado su madre o su hermana que es unos años mayor que ella, pero de verdad es una mujer madura con una inteligencia sin igual.

Me ve a lo lejos, se para y corre a mi encuentro, nos abrazamos y conversamos corto y rápido, me empieza a interrogar, por suerte me he puesto de buen humor al ver mientras caminaba, gente que se vera bien representada en mis textos, eso y solo eso me han cambiado de humor.

 Después de explicaciones y de disculpas respectivas, me invita a almorzar, yo desisto, será por que no tengo un centavo que me sobre solo tengo algunos soles para cigarros y gaseosa que son mi perdición, me mira ya un poco arrepentida y me dice algo que yo jamás olvidare:

Yo te invito, no te preocupes, cuando ganes plata como escritor me llevaras a Paris

Es una promesa-digo y la beso profundamente, siento que la amo.

Todavía es un poco temprano para almorzar, así s que decidimos hacer tiempo entrando a una librería de la plaza san Martin, ella lee mucho y yo también, al menos eso compartimos, el firme deseo por la lectura.

Se compra las ultimas novedades, me dice que me regalara un libro que yo elija, la reto a que no puede comprarlo , hacemos un pacto y le doy el ultimo libro de Roberto bolaño, 2666, y me dice que estoy loco , es demasiado dinero, casi ya ciento veinte soles, me resigno y rio con ella, decidimos comprar los últimos libros de Bryce y algunos clásicos , claro a parte de las revistas de moda, nos sentamos a revisarlos , tomamos un café y ella se enfrasca a leer una de esas revistas para viejas pitucas, que yo detesto, Cosas ,y le digo que mejor guarde esos modales para su casa , me comprende y leemos y hojeamos un libro de Alonso cueto ,con una caratula de veras muy llamativa, una mujer regordeta y unas palabras muy grandes que dice

Finalista del Premio Planeta-Casamerica de novela 2007.

Me siento atraído por el nombre y la tapa, decidimos caminar, hoy es sábado así es que ya no falta mucho para la tarde donde nos meteremos en algún cine, que ya ha elegido, ella paga, se resiste a que yo pague, me siento un pelele, cuando compramos algo y pagamos algo ella saca el dinero y yo recibiendo miradas de desprecio de los vendedores que ya empiezan a decirnos

Que película van a ver.

Por enésima vez en el día, tengo que cederle el paso a la cuenta y ya me esta poniendo en ridículo y eso no me gusta para nada.

Entramos a la sala , nos sentamos juntos y empieza a rodar la película.

 

 




Pathetica - Panda

3 comentarios:

Esteban Ramon dijo...

Alonso Cueto es un gran escritor contemporáneo.

goooooood girl dijo...

your blog is so good......

abel arturo dijo...

Gracias wilmer por el comentario y si o se que alonso es un gran novelista y cuentista: por otro lado me sorprendio tu comentario gooooood girl, no tienes blog pero si cuenta en google, gracias por el comentario y sigue lokkeandome, byee, se you.

 

ABEL ARTURO BENDEZU - BLOG © 2008. Chaotic Soul :: Converted by Randomness